Miércoles 18 de noviembre de 2020, el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires informó con satisfacción que avanza la integración del Barrio 20, ubicado en la Comuna 8 en la Ciudad porteña.
El Barrio 20 se encuentra ubicado en Villa Lugano, perteneciente a la Comuna 8. Se trata de un barrio en el cual viven más de 28.000 vecinos y vecinas. El proceso de integración, que comenzó en 2016 con la ley aprobada por la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, promueve la puesta en marcha de su urbanización.
El Barrio 20 se encuentra en la Comuna 8, entre las avenidas Escalada, General Fernández de la Cruz y Larrazábal, y las calles José Batle y Ordóñez. Desde 2016, el Gobierno de la Ciudad porteña, a través del Instituto de la Vivienda (IVC), encaró un proceso de integración socio urbana que incluye la construcción de 1.665 nuevas viviendas (Papa Francisco), el mejoramiento de más de 3.000 del barrio histórico, la dotación de infraestructura básica (agua corriente, electricidad, cloacas y pluviales) y la apertura de calles.
Según el censo realizado por el IVC en mayo 2016, allí viven casi 28.000 personas, 9.119 familias, en 4.560 viviendas distribuidas en 30 manzanas.
Christian Libonati y Facundo Rouco trabajan en el Instituto de la Vivienda y son parte del equipo que hace posible este proceso.
“Estamos trabajando en la urbanización del barrio para generar que el barrio esté más conectado y, a su vez, que los vecinos y las vecinas tengan mayor dignidad”, afirma Christian.
Por su parte, Facundo Rouco señaló: “Lo que hacemos es coordinar todas las obras que llegan al barrio de infraestructura, apertura de calles, apertura de espacios comunes, que además de ser beneficios suponen cambios y dificultades cuando hay una obra de por medio. Entonces yo lo que hago es articular estas obras con las necesidades de los vecinos y vecinas”.
Una de las iniciativas que comprenden la integración del barrio es la apertura de calles. Esta obra permite una mejor conectividad y accesibilidad dentro del barrio con el resto de la ciudad, el esponjamiento de cada una de las manzanas para lograr la ventilación e iluminación de las viviendas existentes, y la mejora del espacio a través de bocas de tormenta, alumbrado público, arbolado, rampas y señalética. Además, contempla obras de infraestructura para la provisión de los servicios básicos necesarios para los vecinos y vecinas del barrio, como agua corriente, electricidad, cloacas y pluviales.
Estamos trabajando en la urbanización del barrio para generar que el barrio esté más conectado y, a su vez, que los vecinos y las vecinas tengan mayor dignidad.
Las aperturas de las calles fueron consensuadas y definidas en la Mesa de Gestión Participativa (MGP), que es el espacio para que los vecinos y representantes barriales trabajen cada paso del proceso de integración socio-urbana del barrio junto al IVC y otros organismos de la Ciudad. Después de más tres años de trabajo en conjunto, 57 familias que vivían en las trazas de las calles Miralla y Corvalán, fueron relocalizadas en las nuevas viviendas del predio Papa Francisco.
“Aunque durante la pandemia la emergencia nos encontró trabajando en distintas actividades junto a los vecinos, como acompañar el DetectAR, entrega de módulos alimentarios y las campañas de concientización, seguimos adelante con la apertura de las calles Corbalán y Miralla y distintas obras de infraestructura”, recordó Christian.
“La verdad es que este proyecto lleva tiempo, pero cada pequeño paso que damos mejora la vida y eso es una alegría terrible para nosotros como equipo. Por ejemplo, la apertura de Corbalán implicó mayor conectividad para el barrio, mayor espacio para traer servicios y eso en parte funciona como aliciente en un proyecto tan largo porque vemos el impacto que genera y recordamos como estábamos hace 2 o 3 años y decis: vale la pena, ¿no?”, concluyó Facundo.
Fte: GCBA
Redacción / Edición: Libralato Romina
publicación: 19 de noviembre de 2020- caracteres 3888 |